Porque el arte permite hablar de aquello de lo que no se puede hablar, escribo.
Porque a menudo me duele el cuerpo, la vida, el mundo, escribo.
Porque, Ouroboros de tinta, me retuerzo en la oscura cueva de mi propio ombligo, escribo.
Porque a veces el gozo no me cabe, y crece y se expande más allá de la carne, más allá del Alma, más allá de Dios, escribo.
Porque, ¿quién sabe?, quizás algún día mis silabasemillas arriben a alguna lejana isla y en ella germinen y se abran a otros soles, y otros rocíos las bañen, escribo.
Porque quizás mis mariposas de papel preñado puedan un día enjugar alguna lágrima, hacer surgir una sonrisa que estalle en mil carcajadas al viento, escribo.
Sin cómo ni cuándo ni por qué, escribo por escribir que escribo.
sábado, 26 de diciembre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Es estupendo que escribas Xabier, es un acto que permite recibir sensaciones de otro corazón, a veces perdido, y otras veces encontrado.
ResponderEliminarLa sensación es estupenda, y sólo puedo decirte y rogarte... que escribas!.
Unha aperta.
Pués no dejes nunca
ResponderEliminarde escribir.
No te quepa duda
que tus"sílabasemillas"
no caen en terreno
estéril.
Hoy me has sacado
una sonrisa.
:)
Abrazos.
GRACIAS... porque escribes y Gracias porque me dejas entrar... nunca dejes de escribir, nunca dejes de expresar tus sentimientos y por favor, siempre, siempre seguime dejando entrar... te quiero!!!
ResponderEliminar